lunes, 23 de septiembre de 2013

Avril & Santy

Cambie mi vida, mi tiempo y mi forma de pensar por mis hijos. Hoy doy mi vida, mi alma, mis energías y mi corazón, si es posible por sacarlos adelante y enseñarles a vivir. Le pido a Dios que me permita vivir muchos años para acompañarlas en lo dulce y lo amargo, en lo oscuro y en la luz; no puedo vivir su vida, pero si espero que ellos la compartan conmigo. Darles grandes alas para que vuelen más alto que yo; no quiero que sean como yo; espero que sean mucho más y mejor....
Siempre voy a luchar por mis hijos, no importa la edad que tengan, ni dónde estén. Mis hijos me han hecho reír a carcajadas, me han hecho llorar de dolor, me han estresado hasta casi enloquecer... han limpiado mis lágrimas, me han abrazado cuando más lo he necesitado, han hecho de mis piernas su regazo y yo con el alma les he contemplado, les he mimado. Me han visto caer agotada y me han ayudado a ser cada día más fuerte nuevamente. A veces pareciera que me quieren volver loca, pero terminan dándome una lección... gracias a ellos he pulido mi carácter y puedo decir que soy mejor mujer. Mis hijos son un regalo de Dios, son mi corona, mi herencia y para siempre serán mi más preciado tesoro... como un león protege su cachorro, como el cóndor sale en busca del alimento de sus crías... eso y mucho más estoy dispuesta por ellos y para ellos... aunque sus vidas no me pertenezcan, mi vida si les pertenece a ellos......



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